CONSUMER.es EROSKI - 8 de noviembre de 2010, 0h00
Conviene conocer la nueva fiscalidad, las características de la vivienda deseada, la posibilidad de que baje el precio y calcular el hipotético descuento en impuestos
¿Comprar casa en 2010 o no comprarla? Ésta es la cuestión que se plantean numerosos ciudadanos, que no saben si será más beneficioso acelerar la adquisición con vistas a disfrutar de las ventajas fiscales que se mantendrán hasta inicios de 2011 o esperar al año que viene o venideros, con el ánimo de que los precios bajen de manera sustanciosa. El dilema está sobre la mesa y es difícil dar una respuesta estándar capaz de satisfacer a todos. En principio, conviene conocer los entresijos de la nueva fiscalidad que se aplicará a partir del próximo año, las características de la vivienda deseada, la posibilidad de que baje el precio y hacer cálculos sobre el hipotético descuento en impuestos que se podría conseguir.